El prelado del Opus Dei, ha realizado hoy la entrada solemne en la iglesia prelaticia de Santa María de la Paz, tras ser nombrado por Papa Francisco.

Homilía del Prelado del Opus Dei

Benedictus Dominus qui dedit requiem populo suo (1 Reyes 8:56). Esas palabras, que hemos escuchado en la primera lectura, se referían al pueblo de Israel, y las aplicamos ahora para dar gracias al Señor por esta paz que es, para nosotros, la unidad de la Obra. La unidad de la Obra que nos concede el Señor, a Él la agradecemos; unidad que es fuente de verdadera paz.
A la vez nos damos cuenta, y debemos habitualmente tener conciencia, de que esta paz es el mismo Jesús. Como escribe san Pablo, Ipse enim est pax nostra (Ef 2, 14): Él es nuestra paz. La unidad depende fundamentalmente de la gracia de Dios, que no nos faltará nunca, pero depende también de nosotros, en la medida en que estemos más unidos a Jesucristo. Él es nuestra paz; Él es la fuente de nuestra unidad en el Espíritu Santo.