La tradicional Ofrenda de Flores a la Virgen de los Desamparados, patrona de Valencia, que se celebra todos los años los días 17 y 18 de marzo, en estas atípicas Fallas se celebrará los días 3, a partir de las 17 horas, y 4 de septiembre, a partir de las 9 horas.
Los valencianos, pendientes también de la climatología ante posibles tormentas intensas, se preparan para una Ofrenda “que no olvidaremos nunca, más emotiva que nunca”, afirman a Religión Confidencial miembros de una comisión fallera.
Novedades en la Ofrenda
En todos los actos, incluidos los que se realicen al aire libre, la mascarilla es obligatoria, y por tanto lo es en la tradicional Ofrenda a la Virgen de los Desamparados, que se celebrará sin público y con un recorrido cerrado.
El itinerario también será distinto, ya que debido a las obras de peatonalización que se desarrollan en la plaza de la Virgen, el desfile no pasará por las calles de la Paz y de San Vicente. En esta ocasión, la vía 1 discurrirá por las calles del Mar, Avellanas, Palau y Almoina y la vía 2 atravesará las calles Quart, Caballeros y la plaza de Manises, hasta llegar a la plaza de la Virgen.
Además, las comisiones desfilarán en filas de cuatro falleras y falleros, una cifra que se ha reducido de las cinco personas iniciales, «debido a la situación que estamos viviendo y las medidas de seguridad de distancia a aplicar" y tras analizar en profundidad el recorrido y estudiado 'in situ' el espacio que existe en las calles por donde pasará la ofrenda», según las normas de desfile de Junta Central Fallera.
Por su parte, la distancia entre las filas de las comisiones será de aproximadamente tres metros, incluidos el estandarte de la comisión, la Senyera y las canastillas de flores.
Otra novedad en la Ofrenda a la Virgen son los turnos de desfile, ya que a los habituales durante la tarde y la noche se añade uno más por la mañana, que comenzará a las nueve. Los primeros sectores que abrirán la Ofrenda el día 3 de septiembre serán Pla Del Remei - Gran Vía (vía 1) y Campanar (vía 2), mientras que Camins al Grau (vía 1) y Quart de Poblet - Xirivella (vía 2) cerrarán la misma un día después.
Sin pasillo de recibimiento en plaza de la Virgen
Un momento especialmente emotivo otros años de la Ofrenda es el recibimiento a las Falleras Mayores a su llegada a plaza de la Virgen, en el que los componentes de cada comisión las reciben segundos antes de que depositen las flores ante la Virgen.
La habitual escena de las Falleras, llorando de emoción “tal vez no se produzca este año, pero pienso que va a ser más emotiva que otros años, precisamente por lo excepcional que es esta Ofrenda, más emotiva que nunca”, afirman a Religión Confidencial desde una comisión fallera.
Sin embargo, la normativa de este año también prohíbe la realización de pasillos de recibimiento por parte de los componentes de la comisión a las Falleras Mayores a su llegada a la plaza de la Virgen, en la misma plaza o en las salidas establecidas del recorrido oficial.
La Junta Central Fallera calcula que la participación en la Ofrenda se situará entre el 30 y el 40 por ciento respecto a la registrada en un año habitual. Otros años han participado más de 100.000 personas entre falleros y músicos.
Flores para un manto de la Virgen distinto cada año
La Ofrenda de Flores consiste en una pequeña peregrinación desde la falla hasta la plaza de la Virgen, llevando un ramo de flores a la Virgen de los Desamparados desde cada falla.Otros años son claveles, pero este año serán otro tipo de flores más propias de esta época, pero garantizando que será también multicolor el mando de la Virgen.
Algunas comisiones llegan a caminar varios kilómetros. El camino se suele hacer andando, excepto para las comisiones que se encuentran fuera de Valencia, que acuden en autobús y que luego se incorporan caminando.
En la plaza se instala una figura de la Virgen, hecha de madera, de forma que los ramos de flores se van colocando en los estantes vacíos. Con los ramos de flores se va confeccionando el manto de la Virgen, con un dibujo previamente diseñado y que cada año es diferente. Al cambiar el diseño, los colores de los ramos también cambian, siendo los más habituales el blanco, rosa y rojo.
Con las flores sobrantes, se expone un impresionante tapiz, además de los ramos y canastillas especiales que lleva cada comisión.
religionelconfidencialdigital
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