Entrañables suelen ser los encuentros del Papa con enfermos y este no fue una excepción. Francisco estuvo con miles de personas que participan en las obras de caridad que impulsó un santo italiano que vivió entre los siglos XIX y XX: San Luigi Guanella.
"Querido Papa Francisco. Tengo el honor de ser el primero en dirigirme a usted. Estoy muy contento. Vea, esta es mi familia, la que me dio San Luigi. ¡Es esta!”.
Francisco lamentó que haya personas que aunque crean que Dios es padre, no pueden evitar seguir pensando que también es padrón, por lo que permanecen alejados de él.
FRANCISCO
"Si estamos distantes de Él, nos espera, cuando nos acercamos nos abraza, si caemos nos levanta, si estamos arrepentidos nos perdona”.
Recordó que el concepto de "providencia” en el caso de San Luigi no era una palabra de adorno sino una convicción profunda y firmemente arraigada en su vida.
FRANCISCO
"Para él la providencia no era una poesía sino la realidad. Dios se preocupa por nosotros y quiere que nos fiemos de él”.
Puesto que San Luigi impulsó muchas obras de caridad el Papa recordó que es importante colaborar con ellas pero sin perder de vista a los que están al lado de nosotros.
San Luigi Guanella fue gran amigo de Pío X y fue canonizado por Benedicto XVI en el año 2011.
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