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jueves, 9 de julio de 2015

Aprendiendo a conducir

El matrimonio de Wendy, escritora y crítica literaria, se ha roto. En su casa de Manhattan ha vivido absorta en sus libros, su teclado, su ordenador. Y su marido no ha aguantado más y la abandona por otra mujer. A Wendy se le viene el mundo encima pues se da cuenta de su culpa en el fracaso de su matrimonio, y ni siquiera tiene el consuelo de su hija Tasha, pues ésta se encuentra viviendo lejos, en Vermont. Precisamente con la excusa de poder ir a visitarla, decide entonces sacarse el carnet de conducir. Su profesor será Darwan, un refugiado político sij.
Película ligera, agradable, que se desarrolla con tremenda naturalidad. Funciona la idea que aletea en el guión, la metáfora de la conducción como modo de vivir la propia vida: es necesario estar pendientes de lo que sucede alrededor, de los detalles, de las personas del exterior. Si nos encerramos en nuestro propio mundo, nunca avanzaremos y la colisión será segura.
Correcta, elogiable por su fresca factura y sus críticas al materialismo hedonista dominante en Occidente, excepto cuando su tono amable se rompe bobamente en una escena de sexo demasiado explícita y poco eficaz en sus pretensiones cómicas. (Almudí JD). 

Dirección: Isabel Coixet. País:USAAño: 2014. Duración: 105 min.Género:Comedia dramáticaromanceInterpretación:Patricia Clarkson (Wendy), Ben Kingsley (Darwan), Grace Gummer (Tasha), Jake Weber (Ted). Guion: Sarah Kernochan. Producción: Daniel Hammond y Dana Friedman. Música: Dhani Harrison y Paul Hicks. Fotografía: Manel Ruiz.Distribuidora: A Contracorriente FilmsEstreno en España: 3 Julio 2015

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