El cardenal riojano Eduardo Martínez Somalo apeló ayer en Logroño a que "el progreso de la civilización sea un progreso interiorizado en cada uno de nosotros, para que haya un progreso espiritual, que no quiere decir fanáticamente religioso sino coherente con unos principios".
A este respecto insistió que los principios "se entrelazan con la misma Ley natural que fundamenta la existencia del hombre y de la mujer, y de la familia".El prelado hizo estas manifestaciones tras ser recibido por el presidente del Gobierno riojano, Pedro Sanz, en el Palacio del Ejecutivo regional, una visita que al finalizar las vacaciones del cardenal y que es respuesta al encuentro institucional que se celebra con anterioridad en Baños de Río Tobía, pueblo natal del purpurado.
Pedro Sanz entregó al cardenal riojano un ejemplar del libro 'La evolución del retablo en La Rioja. Retablos mayores', del historiador José Manuel Ramírez, cuya publicación ha coincidido con la celebración del Año Santo Jacobeo de 2010. El cardenal declaró después que el encuentro con el jefe del gobierno riojano había sido "cordial y "sincero". Martínez Somalo que con la visita en "mi mente se renuevan varios recuerdos de Logroño, para mi en cierto modo desconocido, si bien es un índice de progreso y de civilización".
Por último, el cardenal afirmó que todos los días "encomiendo a los riojanos ante el Señor, la Virgen y San José". Por su parte, Sanz le deseó que se lleve a Roma unos "buenos recuerdos de La Rioja" y que "nos tenga presentes". También le pidió que trasladase a Su Santidad "los saludos cariñosos del pueblo riojano".
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