Ante los miembros de la Pontificia Academia de las Ciencias, Benedicto XVI lanzó este jueves dos retos a los científicos: planteó la necesidad de "un enfoque interdisciplinar ligado con la reflexión filosófica que conduce a una síntesis", y dirigir sus esfuerzos "al verdadero bien del hombre y al desarrollo integral de los pueblos del mundo".
"Los logros científicos en este nuevo siglo, dijo el Papa, deberían ser siempre guiados por el sentido de la fraternidad y la paz, ayudando a resolver los grandes problemas de la humanidad. El resultado positivo de la ciencia del siglo XXI seguramente dependerá en gran medida de la capacidad del científico para buscar la verdad y aplicar los descubrimientos de manera que vayan de la mano con la búsqueda de lo que es justo y bueno".
Benedicto XVI manifestó la "estima de la Iglesia por la investigación científica" y expresó su "gratitud por los esfuerzos científicos, que alienta y de los que se beneficia. En nuestros días, los científicos aprecian cada vez más la necesidad de estar abiertos a la filosofía si quieren descubrir el fundamento lógico y epistemológico de su metodología y sus conclusiones".
"La Iglesia está convencida, añadió, de que la actividad científica, en última instancia, se beneficia del reconocimiento de la dimensión espiritual del hombre y de su búsqueda de las respuestas definitivas que permiten el reconocimiento de un mundo que existe independientemente de nosotros, que no entendemos completamente y que sólo podemos comprender en la medida en que entendemos su lógica inherente".
RELIGIÓN CONFIDENCIAL
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