Francisco y el patriarca Aram I rezaron por la unidad de los cristianos. El jefe de laIglesia Armenia de Cilicia y el Papa rezaron juntos en la capilla Redemptoris Mater del Vaticano.
Fue uno de los tres actos de la jornada que se convocó con el propósito de mejorar las relaciones de ambas Iglesias.
FRANCISCO
"Todos conocen el empeño de Su Santidad por la causa de la unidad entre los creyentes en Cristo. Ha ocupado puestos importantes en el Consejo Ecuménico de las Iglesias”.
Ante una delegación de la Iglesia Armenia de Cilicia, el Papa recordó las pruebas ysufrimientos por los que ha pasado el pueblo armenio. También habló del papel del Patriarca en la promoción del diálogo entre la Iglesia católica y las Iglesias orientales.
El patriarca Aram explicó que, pese a los cambios sociales y políticos en Oriente Medio y la inestabilidad que han provocado, los cristianos continuarán practicando su fe y pidiendo plenos derechos como ciudadanos. También habló del trabajo de la Iglesia con los necesitados.
ARAM I
Catolicós de la Iglesia Apostólica Armenia de Cilicia
"Con los pobres, los marginados, los oprimidos y las víctimas de la injusticia... en ningún caso la Iglesia debe comprometer esta sagrada vocación”.
También hubo tiempo para los regalos. Aram I dio al Papa una réplica del Evangelio del Catolicós Gostantin I. Francisco le entregó un facsímil enmarcado de una epístola de San Pedro del papiro Bodmer. Con los obsequios sobre la mesa, hablaron de la importancia de las raíces.
ARAM I
Catolicós de la Iglesia Apostólica Armenia de Cilicia
"Porque no podemos vivir sin raíces. Necesitamos nuestras raíces para inspirarnos”.
El patriarca Aram pasó tres días en Roma y también se reunió con el cardenal Kurt Koch que preside el Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos.
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