Aprender a ejercer de madre o de padre está hoy al alcance de un clic, o de pasar por una librería y comprar uno de esos libros estilo “todo lo que quiso saber sobre tal asunto y nunca se atrevió a preguntar”.
En la era de la información, no habría excusa para no estar al día sobre lo que aconsejan pedagogos, educadores o coaches, presuntamente bien enterados –por muy lejos que estén– de cómo debe proceder un progenitor con su hijo, sea que aún vista pañales o ya esté pensando en una carrera universitaria.