![]() |
El prefecto apostólico de Battambang (Camboya), Mons. Enrique Figaredo junto a Carlos Romero, presidente del Congreso. |
Los participantes afirman sentirse impulsados a participar en la vida pública a través la política “una de las más altas formas de caridad”.
El Congreso recuerda en su manifiesto “un acontecimiento que puso en marcha el proceso de actualización y renovación de toda la Iglesia: el Concilio Vaticano II. Un proceso de reforma de mentalidades y de estructuras al que el Papa Francisco, hoy, continúa invitándonos”.
Además, citando la Constitución Apostólica Gaudium et Spes de Pablo VI se comprometen, como cristianos a “dar razón de nuestra esperanza y de nuestra alegría abriendo caminos nuevos, solidarios y comprometidos en la construcción del bien común”.
Por todo ello, en el manifiesto de conclusión del XIX Congreso Católicos y Vida Pública, “alentados por el testimonio de un sinfín de cristianos comprometidos, afirmamos nuestra total adhesión al mensaje que la Iglesia propone al mundo de nuestro tiempo: la creación de una nueva civilización del amor animada por la caridad; principio y motor de su dinamismo” y a seguir “anunciando al Dios Trinitario; luz y amor inefables para los hombres”.